La atención a la diversidad es el conjunto de acciones
educativas que intentan prevenir y dar respuesta a las necesidades (temporales
o permanentes) de todo el alumnado del centro.
Va dirigido especialmente a alumnos que
presentan dificultades en los aprendizajes que se determinan en el currículum
correspondiente a su edad. Esto puede deberse a causas internas (deficiencias
visuales, auditivas, motóricas o psíquicas), por altas capacidades, por
trastornos graves de conducta o personalidad, por carencias en el entorno
socio-familiar o por una historia
de aprendizaje desajustada.
Algunos de
los procedimientos a llevar a cabo
son:
- Detección de necesidades educativas por parte del tutor o maestros y puesta en marcha de las medidas.
- Realización de la Evaluación Psicopedagógica. Es tarea y responsabilidad del EOEP con la participación del profesorado implicado en la educación del alumno/a
- Elaboración del Informe Psicopedagógico por parte del orientador.
- Diseño de las Adaptaciones Curriculares Individuales. Se trata de un proceso de toma de decisiones que toman de forma coordinada con los tutores, maestros y orientadores
- Desarrollo de las Adaptaciones curriculares. Se llevará a cabo una evaluación continua, formativa y sistemática de los progresos del alumno.
Para llevarlo a cabo en el aula, hay que
tener en cuenta las medidas generales y específicas. En primer lugar, como
medidas generales encontramos: los niveles de concreción curricular, el
refuerzo educativo, la orientación y tutoría y la optatividad. Por otro lado,
como medidas específicas podemos destacar: las adaptaciones curriculares
individuales significativas, las adaptaciones de acceso al currículum, los
programas de diversificación curricular, los programas de adaptación curricular
en grupo y los programas de garantía social.
Si el tutor detecta una necesidad educativa especial,
deberá seguir una serie de pasos. Primero, recopilará información de diferentes
maneras. Tras ello, intentará dar respuesta a las necesidades, lo cual puede
terminar con la solución del problema o no. Si no consigue resolverlo, se
demandará ayuda a la UAE, la cual valorará el caso y decidirá las medidas a
adoptar.
En relación
con la orientación, en Educación Infantil, la intervención orientadora es llevada a cabo por los tutores, porque
no existe la figura de un orientador permanente. La orientación está dirigida a
todo el alumnado, tiene un carácter preventivo (no sólo paliativo), se realiza
en un contexto de colaboración entre profesionales, y se articula en el marco
del currículo (Proyecto Educativo y Programaciones de Aula). Se da respuesta a
las necesidades del centro y en consecuencia debe evaluarse, la consecución de los objetivos y la adecuación
de los programas.
Existen varios tipos
de necesidades educativas especiales y, para paliarlas, se intenta crear un
enfoque en el que se centre en las necesidades pedagógicas y en los recursos
que se han de proporcionar, evitándose la diagnosticación de discapacidad.
Estas necesidades pueden deberse a causas físicas, psíquicas, de situación
socio-familiar, etc.
Los casos de Altas Capacidades Intelectuales también
se consideran como personas con necesidades específicas de apoyo educativo, ya
que los contenidos curriculares suelen resultar fácil o aburridos. Por ello se
proponen como solución la aceleración y adaptación curricular. La primera
consiste en adelantarlo un curso. La segunda consiste en programas para
complementar los estudios habituales.
La diversidad del alumnado se trata de un elemento
enriquecedor y hay que tenerlo en cuenta para planificar y desarrollar los
procesos de enseñanza-aprendizaje. Hay que
evitar homogeneizar, resaltar los aspectos positivos, proporcionar una
atención personalizada, contribuir al desarrollo de valores y potenciar las
capacidades.
Aquí podemos encontrar dos vídeos que tratan el tema.
Un recurso que se puede utilizar con los niños de Educación Infantil, es el siguiente vídeo que nos cuenta la historia de un niño que siempre lleva un cazo, del cual no puede desprenderse (lo cual lo relacionamos con una discapacidad). Este cazo le pone algunas barreras a la hora de llevar una vida normal y, a veces, otras personas lo miran raro, pero las personas cercanas, le ayudan a “disimilar” ese cazo y que se convierta parte de su vida. Hay que recordar la gran responsabilidad de la escuela y de la familia en la educación de los hijos. Todos necesitamos que alguien nos escuche, nos enseñe , oriente y nos ayude a aprender las estrategias necesarias para que las cosas que son parte de nuestra vida, lo podamos llevar con dignidad y alegría sacando todo lo positivo y lo bueno que le acompaña.
El siguiente vídeo nos muestra que tener una
discapacidad, no tiene porqué ser un problema. Todos los niños son iguales y
tienen las mismas oportunidades, la única diferencia es que a algunos les pueda
costar más conseguir algunas cosas, pero ello no quiere decir que no lo puedan
conseguir, sino que necesitan más tiempo y más apoyo de los demás. Las personas
con discapacidad pueden vivir una vida feliz, y juntos podemos hacerlo posible.
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